lunes, 15 de marzo de 2010

ALGO SOBRE MI...


Maite Granados, artísta madrileña, licenciada en Bellas artes en la Universidad Complutense de Madrid. Finaliza estudios con una beca en la Universidad de Bellas Artes de Atenas, Grecia en 2003. Ha participado en Arco 2000 y Stampa 2000, 2001 y mostrado su obra en diversos lugares de nuestro país y en otros como Grecia o Escocia, donde desarrolló varios proyectos artísticos como ceramista durante el tiempo que vivió en Edimburgo. Ganadora de varias becas y concursos como el primer premio de pintura rápida del Parque del Buen Retiro de Madrid 2002 entre otros.
Muy aficionada a la fotografía, enamorada de la escultura, ha trabajado en empresas de escenografía, haciendo desde escultura de personajes públicos como Raul Gonzalez (jugador del Real Madrid) para el Club Madridista, (empresa Escenart), hasta escenarios para estrenos de cine o teatros. Dibujante Ilustradora, También figurinista en obras de teatro aficionados, story boards para cortos, videos musicales y publicidad...  
Dedicada a la pintura por encargo.
Docente durante muchos años en campos artísticos, trabajando en Madrid en escuelas y academias de arte .
Ha pasado algunos años dedicada al calzado ecológico como creativo, diseño corporativo y de stand, diseño de las tiendas, producción y jefe de equipo de sus ventas en multitud de lugares de España, complementando ésta labor como diseñadora en su firma de moda y complementos "quetezurzan", con la que no para de hacer showrooms y ferias de diseño por todo el territorio.
Actualmente ejerce como docente en varios centros de arte como profesora de dibujo, pintura cómic e ilustración.

MUSICA SOBRE LIENZO. GRANDES CREADORES I.

RETRATOS I


NEW LOLITA


Vladimir Nabokov
Lolita (fragmento)

" Ahora creo llegado el momento de presentar al lector algunas consideraciones de orden general. Entre los límites de los nueve y los catorce años, surgen doncellas que revelan a ciertos viajeros embrujados, dos o tres veces mayores que ellas, su verdadera naturaleza, no humana, sino nínfica ( o sea demoníaca); propongo llamar nínfulas a estas criaturas escogidas.
(...)
Entre esos límites temporales, ¿son nínfulas todas las niñas? No, desde luego. Tampoco es la belleza una piedra de toque; y la vulgaridad - o al menos lo que una comunidad determinada considera como tal- no daña forzosamente ciertas características misteriosas, la gracia letal, el evasivo, cambiante, anonadante, insidioso encanto mediante el cual la nínfula se distingue de esas contemporáneas suyas.
(...)
Era la misma niña: los mismos hombros frágiles y color de miel, la misma espalda esbelta, desnuda, sedosa, el mismo pelo castaño. Un pañuelo a motas anudado en torno al pecho ocultaba a mis viejos ojos de mono, pero no a la mirada del joven recuerdo, los senos juveniles. Y como si yo hubiera sido, en un cuento de hadas, la nodriza de una princesita, reconocí el pequeño lunar en su flanco.
(...)
Si pedimos a un hombre normal que elija a la niña más bonita en una fotografía de un grupo de colegialas o girl scouts, no siempre señalará a la nínfula. Hay que ser artista y loco, un ser infinitamente melancólico, con una burbuja de ardiente veneno en las entrañas y una llama de suprema voluptuosidad siempre encendida en su sutil espinazo, para reconocer de inmediato, por signos inefables - el diseño ligeramente felino de un pómulo, la delicadeza de un miembro aterciopelado y otros indicios que la desesperación, la vergüenza y las lágrimas me prohiben enumerar- al pequeño demonio mortífero ignorante de su fantástico poder.
(...)
Lolita, luz de mi vida, fuego de mis entrañas. Pecado mío, alma mía. Lo-li-ta: la punta de la lengua emprende un viaje de tres pasos desde el borde del paladar para apoyarse, en el tercero, en el borde de los dientes. Lo. Li. Ta. Era Lo, sencillamente Lo, por la mañana, un metro cuarenta y ocho de estatura con pies descalzos. Era Lola con pantalones. Era Dolly en la escuela. Era Dolores cuando firmaba. Pero en mis brazos era siempre Lolita.
"